COLABORADORES

Stephen H. Dover, CFA
Director de estrategia de mercado
Director del Franklin Templeton Institute

Francis Scotland
Director de Global Macro Research
Brandywine Global

Sonal Desai, Ph.D.
Directora de inversión
Franklin Templeton Fixed Income

John Bellows, Ph.D.
Gestor de carteras
Western Asset

Michael Hasenstab, Ph.D.
Director de inversión
Templeton Global Macro
Introducción
En el primer semestre de 2023, los inversores se enfrentaron al agresivo endurecimiento de la política monetaria por parte de la Reserva Federal (Fed), unos trimestres consecutivos de descenso de los beneficios corporativos, la segunda y tercera mayores quiebras bancarias en la historia de los EE. UU., el casi impago por parte del gobierno federal estadounidense y unas predicciones universales de recesiones en EE. UU. y en todo el mundo.
Teniendo estas cuestiones en cuenta, moderé un debate con nuestros principales economistas, en el que participaron John Bellows, gestor de carteras de Western Asset; Sonal Desai, directora de inversión de Franklin Templeton Fixed Income; Michael Hasenstab, director de inversión de Templeton Global Macro; y Francis Scotland, director de investigación de Brandywine Global. La pregunta clave que quería formular era: ¿De qué disponen los inversores en el segundo semestre de 2023?
A continuación se exponen las principales conclusiones del debate.
- La inflación continuará siendo un problema durante los próximos 6 a 12 meses. Existen algunos indicadores que apuntan a una ralentización de la inflación y a que la economía mundial está entrando en un período de desinflación, en el que la tasa de inflación se está reduciendo y los precios no están aumentando con tanta rapidez. El riesgo es que la inflación no retroceda, y la inflación de los precios subyacentes se ha mostrado estable, pero aún no se han observado todos los efectos retardados de la restricción de la política monetaria. Existe un menor riesgo de deflación, momento en el que los precios bajan de verdad.
- Aunque la inflación está disminuyendo en muchos países, la recuperación económica mundial es desigual.
- China lucha por encontrar fuentes de crecimiento económico. El aumento del crecimiento no se materializó tras la reapertura después de la COVID‑19. Es probable que el gobierno chino ponga en marcha un estímulo macroeconómico adicional.
- La reconstrucción de la cadena de suministro y la deslocalización a países amigos deberían generar oportunidades de crecimiento en algunos países. La reconstrucción de la cadena de suministro está provocando un aumento de la inversión en Asia, especialmente en países como la India e Indonesia. Otros países que deberían beneficiarse son México y Canadá.
Japón se ha beneficiado del reciente aumento de la inflación después de décadas luchando contra el bajo crecimiento económico. Los niveles actuales de inflación y crecimiento han generado oportunidades para invertir los saldos de caja de las empresas. Además, Japón se ha beneficiado del aumento de la participación femenina en el mercado laboral, el cual ha evitado la escasez de mano de obra, lo que a su vez ha favorecido el crecimiento.
- Es probable que los futuros datos económicos aporten nuevas pruebas de la ralentización del crecimiento y de la desinflación actual en EE. UU. No obstante, aunque los mercados llevan un tiempo pronosticando una recesión, es probable que la solidez de los consumidores estadounidenses evite que esta sea masiva.
- ¿En qué cifras se situarán los tipos de interés? Parece que no existe una vinculación con respecto a la rapidez con la que bajarán los tipos en el futuro. El mercado financiero está valorando los recortes de los tipos con la expectativa de que la inflación vuelva a alcanzar los niveles anteriores a la pandemia. Sin embargo, creemos que los 10 años que siguieron a la crisis financiera mundial de 2008 fueron una anomalía; y es probable que la inflación vuelva a los niveles anteriores a la crisis financiera mundial como tendencia a largo plazo (la inflación básica media de EE. UU. fue de aproximadamente el 4 % entre 1958 y 2008, y de algo menos del 2 % de 2009 a 2019)1.
- Se prevé que los tipos de interés reales seguirán aumentando. La Fed acaba de aprobar otra subida de los tipos de interés y se espera que los mantenga por encima del 5 % varios trimestres más. Aunque se espera que la inflación se ralentice o se reduzca durante este período, el resultado es que los tipos de interés reales (tipos nominales menos la inflación) aumenten aunque los tipos nominales no lo hagan. Esto genera una rentabilidad más positiva para los inversores.
- ¿En qué ámbito existen oportunidades?
- Las inversiones en renta fija vuelven a ser buenos diversificadores de carteras. A diferencia de 2022, año en el que tanto la renta fija como la variable tuvieron rentabilidades negativas conjuntamente, en la actualidad existe una baja correlación entre las inversiones en renta fija, renta variable y otros activos de riesgo.
- El aumento selectivo de la duración ofrece una rentabilidad total atractiva. Creemos que la duración neutra a más corta ofrece mejores perfiles de riesgo/rentabilidad para el resto de 2023. Los actuales niveles de rendimiento y el pico previsto de los tipos de interés se combinan para obtener una rentabilidad total esperada positiva.
- El precio de la deuda de alto rendimiento es atractivo, ya que los inversores mantienen la cautela con respecto a la economía. Los rendimientos actuales ofrecen grandes rentabilidades a los inversores activos. Sin embargo, los inversores deben ser selectivos, pues algunos créditos corporativos de menor calidad son susceptibles al riesgo de impago y nos preocupa la ampliación de los diferenciales de crédito.
- Los mercados emergentes pueden ofrecer diversificación. Muchos mercados emergentes han mostrado solidez, en parte gracias al control de la emisión de deuda en mayor medida que sus homólogos de los mercados desarrollados. Asimismo, reaccionaron rápidamente para controlar la inflación, pues subieron los tipos antes que el Banco Central Europeo (BCE) y la Fed. Dado que muchos bonos de los mercados emergentes disfrutan de rendimientos atractivos, esta clase de activos proporciona otra fuente de rentabilidad que no está necesariamente sincronizada con el resto del mundo.
Aunque la experiencia de los inversores en los últimos seis meses ha sido muy volátil en términos de tipos de interés y oportunidades cambiantes, creemos que la Fed seguirá controlando la inflación y puede que mantenga los tipos más altos durante más tiempo del que algunos esperan. Las oportunidades de crecimiento varían según el país, así como según los sectores y los plazos de vencimiento. La renta fija vuelve a mostrar una baja correlación con otros activos de riesgo, lo que ofrece una posible diversificación y una mayor protección de la cartera.

Stephen Dover, CFA
Director de estrategia de mercado,
Franklin Templeton Institute
- Fuente: Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), análisis del Franklin Templeton Institute.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS?
Todas las inversiones conllevan riesgos, incluida la posible pérdida de capital.
Los valores de renta fija conllevan riesgos de tipo de interés, crédito, inflación y reinversión, así como una posible pérdida del capital. A medida que los tipos de interés aumentan, el valor de los títulos de renta fija disminuye.
Los valores de renta variable están sujetos a variaciones en los precios y a una posible pérdida del capital.
Los riesgos especiales están asociados con la inversión en valores extranjeros, incluidos los riesgos ligados a los acontecimientos políticos y económicos, las prácticas comerciales, la disponibilidad de información, los mercados limitados y las fluctuaciones y políticas del tipo de cambio de moneda. Las inversiones en mercados emergentes entrañan riesgos más altos relacionados con los mismos factores. Los títulos de deuda soberana están sujetos a varios riesgos adicionales además de los relacionados con los títulos de deuda y los valores extranjeros en general, incluido, entre otros, el riesgo de que una entidad gubernamental no quiera o no pueda pagar los intereses y el principal de su deuda soberana. En la medida en que una estrategia se concentre en países, regiones, industrias, sectores o tipos de inversión específicos en cada momento, puede estar expuesta a riesgos mayores por sucesos adversos acaecidos en esas áreas concretas en comparación con otra estrategia que invierta en una variedad más amplia de países, regiones, industrias, sectores o inversiones. China puede estar sujeta a unos niveles considerables de inestabilidad económica, política y social. Las inversiones en valores de emisores chinos conllevan riesgos específicos de China, como determinados riesgos jurídicos, normativos, políticos y económicos.
La gestión activa no garantiza las ganancias ni protege contra las caídas de los mercados.
