COLABORADORES

Tim Wang, Ph.D.
Head of Research,
Clarion Partners
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Desde que el Acuerdo de París de 2015 de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) estableció para 2050 un objetivo global de emisiones netas de valor cero, los objetivos de desarrollo sostenible se han convertido en una mayor prioridad para el sector de los CRE (bienes inmuebles comerciales). Dado que los edificios comerciales y residenciales representan aproximadamente el 40 % de las emisiones globales de carbono, los propietarios desempeñan un papel integral en la consecución de los objetivos de reducción de carbono.1 La IRA (Ley de Reducción de la Inflación) de 2022, promulgada por el presidente Biden, introduce políticas adicionales para ayudar a alcanzar los NZG (objetivos de emisiones netas de valor cero) globales.
La ley IRA se considera la política más potente hasta la fecha para fomentar la inversión de capital en eficiencia energética y energías renovables en el entorno de la construcción. Estas mejores prácticas de cara al futuro son muy codiciadas por muchos inquilinos y pueden mejorar el valor global del edificio. Además, se ha demostrado que los activos más sostenibles suelen tener una mayor eficiencia operativa y un mejor rendimiento de la inversión a largo plazo.
En este documento examinamos algunos de los mayores programas existentes y previstos relacionados con la energía limpia, y cómo la legislación ha permitido a los inversores en CRE (bienes inmuebles comerciales) aprovechar mejor los incentivos gubernamentales para descarbonizar los activos de manera rentable.
- Fuente: Jones Lang LaSalle. 2023.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS?
La rentabilidad pasada no es garantía de la rentabilidad futura. Tenga en cuenta que los inversores no pueden invertir directamente en un índice. La rentabilidad de los índices no gestionados no refleja las comisiones, costes ni gastos de suscripción.
Los valores de renta variable están sujetos a variaciones en los precios y a una posible pérdida del capital. Los valores de renta fija conllevan riesgos de tipo de interés, crédito, inflación y reinversión, así como una posible pérdida del capital. A medida que los tipos de interés aumentan, el valor de los títulos de renta fija disminuye. Las inversiones internacionales están sujetas a riesgos especiales, entre los que se incluyen el riesgo de fluctuaciones cambiarias y de incertidumbre social, económica y política, los cuales podrían generar un aumento de la volatilidad. Estos riesgos son más acentuados en los mercados emergentes. Las materias primas y las divisas acarrean un mayor riesgo, que abarca las condiciones del mercado, políticas, normativas y naturales, y pueden no ser adecuadas para todos los inversores.
Los valores del Tesoro de EE. UU. están formados por obligaciones de deuda directa emitidas y respaldadas por la solvencia y el crédito del gobierno estadounidense. El gobierno de EE. UU. garantiza los pagos de principal e intereses ligados al Tesoro estadounidense si se mantienen los valores hasta su vencimiento. A diferencia de los valores del Tesoro de EE. UU., los valores de deuda emitidos por agencias y organismos federales, así como las inversiones relacionadas, pueden estar o no respaldados por la solvencia y el crédito del gobierno estadounidense. Si bien el gobierno estadounidense garantiza los pagos de principal e intereses correspondientes a los valores, dicha garantía no se aplica a las pérdidas derivadas del descenso del valor de mercado de dichos valores.
