COLABORADORES

Jake Williams
Global Co-Head of Alternatives
Wealth Management Product

Arthur Thomson
Global Alternatives Product Strategy Specialist

Peter Blue, CFA, CAIA, FRM
Head of Alternative Solutions
En Franklin Templeton, tenemos el compromiso de ofrecer a los inversores información puntual y perspectivas sectoriales sobre los mercados privados. Los mercados privados están cambiando rápidamente y esta serie es parte de nuestros esfuerzos por ofrecerle información clave que está definiendo el sector”

George Stephan
COO - Global Wealth Management Alternatives
Con el auge de los vehículos abiertos, los inversores y asesores tienen más flexibilidad a la hora de aumentar su exposición a los activos privados. Los fondos cerrados, que han sido la principal vía desde hace mucho tiempo, requieren compromisos de capital y disposiciones escalonadas. En cambio, los fondos abiertos ofrecen suscripciones y reembolsos continuos, lo que ofrece exposición inmediata y una gestión de la liquidez más flexible.
Cada estructura tiene sus ventajas y desventajas, desde la complejidad operativa hasta el ritmo de inversión, pasando por las expectativas de rentabilidad. Aunque pueden requerir un mayor esfuerzo operativo, los fondos cerrados pueden ofrecer exposición 100 % a activos privados sin necesidad de activos líquidos.
En este documento de nuestra serie de Perspectivas de los mercados privados, comparamos las ventajas de ambos tipos de fondos y analizamos cómo pueden los inversores utilizar un enfoque combinado para equilibrar la eficiencia, la liquidez y el crecimiento de la cartera.
Conclusión y puntos destacados
Una asignación combinada a vehículos abiertos y cerrados puede ofrecer un enfoque eficaz de inversión en activos privados, con un equilibrio de eficiencia operativa y flexibilidad de la inversión. Para los inversores más sofisticados, los fondos cerrados ofrecen exposición 100 % a activos privados sin necesidad de activos líquidos. Aunque pueden requerir mayores esfuerzos operativos, una vez completados los trámites iniciales de incorporación y diligencia debida, esta carga se reduce sustancialmente durante el resto de cada cosecha.
Los fondos abiertos aportan flexibilidad, al ofrecer exposición inmediata a una cartera totalmente invertida y permitir suscripciones y reembolsos periódicos. Esta estructura contribuye a una gestión eficiente de la liquidez y el capital, lo que ayuda a los inversores y asesores a reajustar la cartera, reinvertir los repartos de los fondos cerrados o financiar las solicitudes de capital. A la larga, una asignación combinada a fondos abiertos y cerrados puede ayudar a los inversores a alcanzar sus objetivos de inversión de forma eficiente, a la vez que mantienen la flexibilidad en su cartera de activos privados. La combinación ideal dependerá de las necesidades específicas de un inversor, así como las características de la clase de activos privados objetivo, incluidas las expectativas de rentabilidad y el perfil de reparto.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS?
Todas las inversiones conllevan riesgos, incluida la posible pérdida de capital.
Las inversiones en estrategias de inversión alternativas son complejas y de carácter especulativo, conllevan riesgos significativos y no se deben considerar un programa de inversión completo. En función del producto en el que se invierta, es posible que las inversiones alternativas ofrezcan solo una liquidez limitada y son adecuadas únicamente para personas que puedan permitirse perder el importe íntegro de su inversión. Las estrategias de inversión centradas principalmente en las empresas privadas plantean ciertos desafíos y entrañan más riesgos que las inversiones en las empresas públicas, como lidiar con la falta de información disponible sobre esas empresas y su falta general de liquidez.
Las estrategias de inversión centradas principalmente en los activos de titularidad privada plantean ciertos desafíos y entrañan más riesgos que las inversiones en las empresas públicas, como lidiar con la falta de información disponible sobre esas empresas. Además, una inversión en activos privados o en instrumento que invierten en ellos se vería como falta de liquidez y podría requerir un compromiso a largo plazo sin garantía de rentabilidad. Tampoco pueden existir garantías de que las empresas hagan que sus valores coticen en un mercado de valores. Por ende, la ausencia de un mercado secundario líquido establecido para algunas inversiones podría incidir negativamente en el valor del mercado de esas inversiones y en la capacidad de los inversores para enajenarlas en el momento oportuno o a un precio favorable.
